Como ya hemos comentado en la anterior etapa, debido a las fuertes lluvias del día anterior contratamos un game drive con el Crocodile Camp, y fue muy buena decisión. Para empezar se volvió a pasar la noche diluviando por lo que las pistas volvían a estar tremendamente embarradas.
Slalom por el barro en Masai Mara
Nuestro conductor, que también se hacía llamar Mike como nuestro amigo de Samburu y el dueño de la empresa de alquiler del 4x4, tenía la situación mucho más controlada que nosotros y desde el primer momento le dió zapatilla al 4x4 por el barro haciendo slalom y derrapando sin ningún problema, por lo que se metió sin miedo en sitios en los que nosotros no lo habríamos ni intentado.
Familia de leones en Masai Mara
Pronto llegó la primera llamada del día, que nosotros interpretamos con ilusión visto el volantazo que dió y la velocidad que cogió. Como era a primera hora del día pensábamos que podrían ser depredadores disfrutando de una cacería pero al llegar vimos que nos habíamos quedado muy cortos...
En cuanto bajó la velocidad pudimos ver un grupo enorme de leonas con 6 cachorritos de león. De todos los encuentros con vida salvaje en varios parques africanos durante estos años podemos decir que este ha sido posiblemente el mejor de todos.
A las pruebas nos remitimos.
Con este avistamiento Mike ya se había ganado el sueldo en el primer par de horas de trabajo... Nos preguntó por el animal que más ilusión nos hacía ver y le dijimos que el leopardo, que era el único animal que no habíamos visto aún en Kenia (habíamos visto varios en otros parques africanos pero en Kenia se resistía).
Como se conocen todas las zonas de memoria puso rumbo a una zona donde solía merodear un leopardo pero no hubo suerte. De todas formas vimos muchísimos animales desde muy cerca.
Grupo de 5 Guepardos en Masai Mara
Cuando estábamos ya cerca de terminar nuestro exitoso game drive (hacía ya mucho sol y cada vez se veían menos animales) el teléfono de Mike volvió a sonar y bajo una acacia encontramos un grupo de 5 guepardos refugiándose del sol.
Esto es algo bastante inusual, aunque no en Masai Mara ya que estos guepardos se mueven en grupo desde hace ya varios años y son bastante conocidos por estos lares. Un regalo para terminar la mañana.